Convocada por la Organización de Naciones Unidas (ONU), la Conferencia sobre el MEDIO AMBIENTE realizada en Estocolmo, Suecia entre el 5 y el 16 de junio de 1972, fue la primera gran conferencia de la ONU sobre cuestiones ambientales internacionales, y marcó un punto de inflexión en el desarrollo de la política internacional del medio ambiente.
Otro momento importante para el mundo lo constituyó: La Cumbre de Río (o Cumbre de la Tierra), Conferencia de Naciones Unidas celebrada en Rio de Janeiro. del 3 al 14 de junio de 1992. Participaron 172 países (con 108 jefes de Estado) y 2400 representantes de organizaciones no gubernamentales. Durante la cumbre se trataron los temas de medio ambiente y desarrollo sostenible. Como resultado, se generaron los siguientes documentos: Agenda 21, la Declaración de Principios Forestales, la Convención para un Marco de las Naciones Unidas en Cambio Climático, la Convención de las Naciones Unidas sobre la diversidad biológica y la Declaración de Río sobre Medio ambiente y Desarrollo.
Los países acordaron que la evidencia científica sobre el cambio climático hacía pertinente que se adoptaran medidas a nivel global. De ahí nació la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (UNFCCC, en su sigla en inglés).
Tambièn el Protocolo de Kyoto, establecido en 1997, es un tratado internacional cuyo objetivo principal era lograr que para 2008-2012 los países desarrollados disminuyeran sus emisiones de gases de efecto invernadero a un 5% menos del nivel de emisiones de 1990.
La cumbre mundial sobre desarrollo sostenible, (Johannesburgo, Sudáfrica, 26 de agosto al 4 de septiembre del 2002), se celebró atendiendo a la convocatoria de Naciones Unidas, para efectuar una evaluación de la implementación de los acuerdos de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, realizada en Río de Janeiro, Brasil, en 1992.Trató la sobre explotación de los recursos naturales y la necesidad de emprender el compromiso del desarrollo sustentable, a través de la interacción de políticas económicas, sociales y ambientales. Pretendió responder a la preocupación de la comunidad internacional por frenar el deterioro ambiental que se registra a nivel global debido a los procesos insustentables.
CUBA, contribuye mediante sus estructuras nacionales y territoriales y la creación de instrumentos legales, practicados en todas las ramas de la economía, a regular el estricto cumplimiento de todo cuanto pueda afectar el Medio Ambiente.
Son grandes los esfuerzos que la comunidad internacional debe continuar realizando para mitigar los efectos sobre Medio Ambiente, porque los intereses de una minoría y la irracionalidad de unos pocos, están llevando a la humanidad a enfrentar grandes crisis medio ambientales, que ponen en peligro la vida en el planeta. La situación de crisis actual, constituye momento oportuno para la UNIDAD y expandir el desarrollo de la ciencia.
Pensamos como País. Por eso nuestro pensamiento es innovador y de acción transformadora. Ejemplo de ello, lo constituye el Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas, institución que se fortalece, refuerza sus potencialidades y en el año 50 de su fundación, prestigia a las Ciencias Agrícolas. Sus investigadores y trabajadores en general, han desarrollado diferentes biofertilizantes y bioestimulantes como el EcoMic® (a base de hongos micorrízicos arbusculares), el Azofert® (a base de bacterias fijadoras de Nitrógeno) y el QuitoMax (a base de polímeros de quitosana obtenidos de exoesqueleto de langosta), con resultados satisfactorios en grandes extensiones de tierra para garantizar no solo el incremento de las producciones a favor de la economía del país, sino que tienen entre otras particularidades, la de ser inocuo para la salud humana y el Medio Ambiente.
PROTEJAMOS LA VIDA, UN MUNDO MEJOR ES POSIBLE. #SomosCuba. #SomosContinuidad. #VamosporMàs.